Liderazgo transformacional: qué es y por qué desarrollarlo

“Las empresas no necesitan jefes, sino líderes”. Esta frase y otras con significados parecidos, las cuales se escuchan con mucha frecuencia en los últimos tiempos, hacen referencia a un cambio de paradigma en aquellos profesionales que dirigen o son responsables de equipos de trabajo. A este nuevo tipo de liderazgo se le conoce como transformacional, y su principal objetivo es influir de forma positiva en el progreso profesional y personal de los individuos con los que se trabaja, desde una perspectiva consciente.

Tradicionalmente, las empresas han entendido la figura de líder como un jefe con las competencias necesarias para distribuir tareas entre los miembros de un equipo y garantizar que el trabajo definido se ejecutase de la forma y en las fechas establecidas. Este tipo de liderazgo apenas dejaba espacio para la innovación y la creatividad por parte de los empleados y, en ocasiones, los profesionales que lo ejercían no dudaban en utilizar un cierto autoritarismo para conseguir sus propósitos.

El estilo de liderazgo que demandan las empresas en la actualidad es muy distinto, ya que se prioriza la motivación, la autonomía y la satisfacción de los profesionales. El rol de líder está cambiando radicalmente: la figura del jefe que dirigía al equipo, diciéndole qué tenían que hacer y cómo hacerlo, ha dado paso a un líder que actúa como guía, tratando de alentar e inspirar a su equipo.

¿En qué se diferencia el liderazgo transformacional del liderazgo transaccional?

El liderazgo clásico o transaccional intenta, sobre todo, mantener la estabilidad de la empresa, usando para ello un estilo de dirección caracterizado por una jerarquía muy marcada, donde se considera un buen empleado a aquel que sigue al pie de la letra las indicaciones de sus jefes. Un profesional que no tiene interés en proponer cambios y, muchas veces, ni siquiera llega a plantearse si las cosas podrían hacerse de otra manera.

Las empresas que funcionan de un modo transaccional practican un estilo de comunicación unidireccional, donde los líderes deciden los caminos a seguir, por lo general bastante conservadores, y se limitan a marcar las directrices que consideran convenientes para llevar a término las metas.

El liderazgo transformacional es todo lo contrario: se le otorga una gran importancia al feedback entre responsables y empleados, a los que se les anima a aportar lo que consideren necesario para mejorar la calidad del trabajo y a ser proactivos y creativos.

¿Qué es un líder transformacional?

Un buen líder transformacional tiene una serie de capacidades y cualidades que le permiten tener una relación positiva y enriquecedora con el resto de profesionales de la empresa, independientemente de su posición en el organigrama.

Un ejemplo perfecto de líder transformacional sería el de un profesional con las siguientes capacidades y características:

• Capacidad para influir positivamente en los demás.
• Capaz de motivar, inspirar y mover a la acción.
• Empático y con excelentes dotes comunicativas.
• Sabe cómo reconocer, valorar y premiar el trabajo bien hecho.
• Ofrece la suficiente confianza para que los empleados no tengan miedo a proponer cambios, implantarlos y ser creativos.
  

Los distintos tipos de liderazgo

A medio camino entre el liderazgo más clásico o transaccional y el nuevo liderazgo transformacional, existen otros dos tipos de liderazgos, que podrían considerarse “intermedios”.

• Liderazgo adaptativo, donde el líder trata de adaptarse, en mayor o menor medida, a las personas de la empresa, es decir, no se limita a imponer su particular forma de dirigir una empresa o grupo de trabajo.
• Liderazgo carismático. Son personas con una gran capacidad de seducción y empatía, por lo que apenas les cuesta esfuerzo convencer a los demás de sus opiniones, puntos de vista y formas de trabajar.

Principales ventajas del liderazgo transformacional

Las empresas que practican el liderazgo profesional pueden conseguir beneficios tan importantes como:

• Mejorar la calidad del trabajo, como resultado de la suma de ideas y propuestas de todos los empleados.
• Como consecuencia directa del aumento de la motivación y de la mejora de la autoestima de los trabajadores, estos aumentan notablemente su rendimiento y productividad.
• Este tipo de liderazgo tiene un impacto muy positivo en los profesionales, logrando que se comprometan mucho más con la empresa y con el equipo de trabajo
• Aumenta la confianza y seguridad en sus posibilidades de los empleados, lo que les ayuda a manejarse exitosamente en momentos de presión y adaptarse a los cambios.

¿Dónde se aplica el liderazgo transformacional?

El liderazgo transformacional puede aplicarse en cualquier empresa, institución u organización que pretenda trabajar de forma dinámica e innovadora, tratando de sacar el máximo potencial de las personas creando el contexto apropiado.

Un líder transformacional tiene que ser capaz de motivar al máximo equipo y servirles de inspiración para aportar al trabajo entusiasmo y creatividad, logrando así los mejores resultados posibles.

Por eso, la formación es clave para que una persona interesada en dirigir equipos acabe convirtiéndose en ese nuevo líder que buscan y necesitan las empresas hoy en día: una persona empática y motivadora, que actúe como inspiración y ejemplo a seguir por sus empleados.