Cursos de formación continua: la clave para los profesionales de tu empresa

Si quieres que los profesionales de tu empresa se adapten a las nuevas exigencias del mercado, apuesta por los cursos de formación continua en tu organización.

cursos-de-formacion-continua
Tea Polgar

Tea Polgar

En un mercado cada vez más competitivo y cambiante, el éxito de cualquier empresa depende en gran medida de la habilidad, adaptabilidad y conocimientos de su equipo. Por eso, los cursos de formación continua juegan un papel vital en este escenario, proporcionando un camino sistemático y estratégico para el desarrollo profesional. Este tipo de formación combina aspectos teóricos y prácticos a través de cursos especializados para garantizar que los empleados se mantengan actualizados y mejor equipados para enfrentar los desafíos del trabajo. Pero, ¿cuáles son exactamente los beneficios de la formación continua para tu empresa?


¿Qué son los cursos de formación continua y en qué se diferencian de los cursos sueltos?

Los cursos de formación continua son un medio para proporcionar un proceso constante de adquisición de conocimientos, actitudes, aptitudes y competencias. Estos cursos son esenciales para aprender o mejorar una profesión, perfeccionar el desempeño de funciones específicas y mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías. ¿El problema? Que el 80% de las empresas españolas no ofrece ningún tipo de formación continua a sus empleados, según el INE, un porcentaje que se eleva hasta el 83% en el caso de las microempresas.

Por su parte, los cursos sueltos suelen responder a necesidades formativas más puntuales y no siempre están vinculados a una estrategia formativa más amplia. Mientras que los cursos sueltos pueden proporcionar conocimientos o habilidades específicas, la formación continua es un compromiso a largo plazo con el crecimiento profesional y personal, la excelencia en el trabajo y el reciclaje constante de habilidades y conocimientos. Y, quizás por eso, a priori se perciba erróneamente como más complicada de implementar en las empresas.

Tipos y ejemplos de formación continua

Existen diferentes tipos de formación continua, adecuados para diversas necesidades y preferencias de aprendizaje. Algunos ejemplos incluyen las certificaciones profesionales, renovaciones de licencias, formaciones presenciales, cursos online, actividades de e-learning, formaciones híbridas (una combinación de cursos online y clases presenciales), talleres prácticos y eventos profesionales con contenido formativo.

La formación permanente y los cursos bonificados para trabajadores

Entre las múltiples modalidades de la formación continua, destacan los cursos de formación permanente y los cursos bonificados. Los cursos de formación permanente se centran en la actualización y perfeccionamiento de competencias especializadas, cubriendo áreas temáticas específicas para mejorar el desempeño laboral.

Por su parte, los cursos bonificados son una oportunidad excepcional para las empresas, permitiendo la mejora de competencias y habilidades de sus empleados sin incurrir en costes iniciales. Estos cursos son gestionados por el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) y, según los datos de Fundae, casi un 20% de las empresas beneficiarias potenciales han realizado algún tipo de formación bonificada en 2021.

Ventajas de la formación continua

La formación continua es una poderosa herramienta para enfrentarse a los desafíos del mercado laboral actual. No solo proporciona a los empleados la flexibilidad y los conocimientos necesarios para mantenerse a la vanguardia, sino que también beneficia a las empresas en múltiples formas. Por eso, diversos estudios realizados en los últimos años han observado un incremento de hasta más del 20% en la productividad de los empleados que reciben formación continua.

Entre los numerosos beneficios de la formación continua se encuentran:

  • Mejora de las competencias de los trabajadores
  • Potenciación de las soft skills
  • Actualización constante en tecnologías y procesos de transformación digital
  • Mejora del clima laboral y las relaciones entre los trabajadores
  • Fortalecimiento del employer branding

Además, una estrategia de formación continua eficaz puede resultar en un aumento significativo de la rentabilidad y productividad empresarial.

Implementación de una estrategia de formación continua

Para implementar una estrategia de formación continua efectiva, es importante considerar varios factores. Primero, los objetivos y necesidades concretas de la empresa deben guiar la estrategia de formación. Segundo, las metodologías de aprendizaje deben ser flexibles y dinámicas, adaptándose a las necesidades de los empleados. Tercero, es recomendable explorar opciones como la autoformación o los cursos online, que proporcionan una mayor flexibilidad. Por último, la elección de un buen equipo docente es crucial para garantizar una formación de calidad.

Además, es esencial que la formación se adapte a lo que la empresa y sus empleados realmente necesitan, teniendo en cuenta las funciones, la formación previa, la motivación y las circunstancias y preferencias personales de cada empleado.

En resumen, la formación continua es una inversión esencial para cualquier empresa que busque crecer y prosperar en el mundo empresarial actual. Al mantener a los empleados al día con las últimas tendencias y demandas del mercado, la formación continua no solo mejora la productividad y eficiencia de los empleados, sino que también garantiza que la empresa cuente con un equipo altamente capacitado y comprometido con su crecimiento profesional. La inversión en formación continua es, sin duda, una inversión en el futuro de la empresa.